Promoción 2010

Siempre ten presente que la piel se arruga, el pelo se vuelve blanco,los días se convierten en años, pero lo importante no cambia.Tu fuerza y tu convicción no tienen edad,tu espíritu es el plumero de cualquier tela de araña.Detrás de cada línea de llegada hay una de partida,detrás de cada logro hay otro desafío.Mientras estes vivo, si extrañas lo que hacías, vuelve a hacerlo; no vivas de fotos amarillas.Aunque todos esperen que abandones,tú nunca dejes que se oxide el hierro que hay en tí.Haz que en vez de lástima te tengan respeto.Y por último, cuando por los años no puedas correr: trota; cuando no puedas trotar, camina;cuando no puedas caminar usa el bastón....¡pero nunca te detengas!

Madre Teresa de Calcuta.

Cuanta gente que la movía que existió, cuanta gente increíble que me transmitió este tipo de textos como bases para mi vida durante doce años. Nunca parar, y como dijo Pato hoy en la misa "es mentira qe todo tiene un final y todo termina" porque el objetivo todavía no está alcanzado. Porque esto recién empieza. Quizás, yo no tenga el mismo sentimiento que él, que cree que su misión es la de llegar a Dios, pero si comparto ese pensamiento... porque hoy no termina mi camino, al contrario. Mi camino empieza con más fuerza que nunca, porque antes era fácil mantenerse en contacto o ser buenos amigos si todas las mañanas era rutina tener que vernos la cara, pero ahora empieza mi ruta para jamás perderlos. Empieza la ruta de volverme loca por entender este mundo donde todo funciona con la famosa ley de la selva, pero en esa locura tenerlos a mi lado, como ayer, como hoy... como siempre. No termina, porque yo creo que mi primordial objetivo es quedar marcada en sus vidas por haberles hecho bien, que no se olviden mi nombre, que si me cruzan por la calle tengan las mismas ganas de abrazarlos como voy a tener yo. Es raro, es dificil y creo este año fue por demás particular. Me juegan muy fuertes los sentimientos de imaginar a la nena de seis años que entró a ese patio, ya conocido, sin entender mucho quienes eran esos otros 24 nenes formaditos en fila, esa nena que creció en esos pasillos y día a día fue perdieron los miedos de "los grandes" para terminar tomando mate con ellos y teniéndoles un cariño inmenso. Esa nena que primero se perdió y temió de las historias de fantasmas de cada recoveco oscuro del colegio, para después contarlas con entusiasmo, reírse del que se las creía y pasear por el colegio hasta con los ojos cerrados conociendo cada centímetro de su suelo. Esa, esa nena que un día con dos colitas muy, muy largas llegó y que mañana se va de la mano de algún otro alumnito que empieza a recorrer el mismo camino que ella dejó atrás. Se va mirando el sendero que recorrió, todos sus logros, las personas que le enseñaron y aquellas que más que nadie estuvieron para cagarla a pedos y aplaudir sus avances. Mirando cada valdosa, porque todas tienen un recuerdo, sacando del polvo situaciones que creía olvidadas y que la hacen sonreirse y saber que tiene a las mejores personas a su lado; que pase lo que pase, ellos están. Se va, viendo el descontrol de un patio lleno de nenes corriendo y el descontrol de la facultad que la espera. Se va, notando que no es el final, que en realidad: empieza. Que termino la preparación, terminaron los doce años de mamá y papá y maestros y etcétera de personas solucionando bardos para salir al mundo y poner en práctica eso que aprendió, como cuando uno saca el registro y lo mandan a irse al centro, cagado hasta las patas... pero con el tiempo la manejas. Salgo al mundo, "aprendo a volar", camino, avanzo... voy saludando todos los recuerdos que dejo atrás pero que nunca se borran de mi alma, incluso esas espinas que me pinchan cada tanto pero que me hicieron crecer, que hoy me tienen acá; agradecida por todos estos años. Agradecida por el amor, por las sonrisas, por los abrazos, por hacer de ese colegio enorme un lugar donde yo, me sentía en casa. "Para nosotros, colegio y hogar" y quizás esté el que no lo entienda, el que diga "bueh, tanto" pero el centeno provoca eso, más allá de todos sus defectos, y los prejuicios que se imponen en materia de su dependencia militar; porque nunca jamás nadie intento meterme algo en la cabeza que no fuese lo que yo quisiera pensar, nunca nadie me juzgó o me dejó por pensar diferente. Así que, una vez más, gracias. Y espero tenerlos para siempre en esta nueva carrera que empieza, agradezco infinitamente a la vida haberme cruzado con gente como ustedes, con energía como la suya y sonrisas que contagian y luz como la que irradian. Los amo, y estoy segura de que nada ni nadie puede romper esto, esto a lo que llamamos amistad; esto a lo que no sólo llamamos, a esto que ES amistad. Son lo mejor de mi vida, hoy y siempre. Gracias por cada latido. Jamás me falten, pase lo que pase, aunque la vida nos separe sepan que sus nombres no se borran de mi corazón, que viven en cada una de mis sonrisas, y que miren a donde miren ahí voy a estar, en las buenas tanto como en las malas. Porque somos amigos en las buenas pero en las malas, somos hermanos. Y nada me hace más feliz que el sentimiento de haber elegido los mejores hermanos y compañeros de vida. Gracias, gracias, gracias. Es todo lo que puedo decir. GRACIAS.

Agus Terrizzano,
01/12/10