1.23.2009

Sin saber.


Aprendí a odiarlo con el tiempo y me sentí mucho mejor; sin embargo uno siempre añora al que rompe su corazón. Ahora vuelve a seducirme, cuando no lo espero. Falsas promesas me ha vendido una vez más, y yo solo se que todo puede terminar de una manera: en un rincón, hecho pedazos, mi amargo final... y ahora somos como dos extraños que se van sin más, como dos extraños más que van quedándose detrás, yo sigo estando enamorada y tú sigues sin saber si lo has estado alguna vez.

No hay comentarios: