1.17.2010

gasj se volvío a encender.


Anoche, brindis de por medio, tuvimos una charla que me dió que pensar. Estos últimos días fueron sumamente distintos a los que viví hace un año atrás, quizás haya tenido muchas más ansias de por fin, llegar a mi hogar nuevamente pero al llegar el instante de subirme al micro... me hubiese quedado ahí para siempre.
Porque cada vez que daba el último paso hasta la cima, que veía y respiraba la paz de la montaña mi alma se llenaba. Seguramente sus sonrisas influían mucho, a donde miraba hallaba gente riendo y dejando atrás todo el cansancio que había recriminado a lo largo del camino. Una vez más siento que esta es una llama encendida que jamás se va a apagar, me siento una chispa potente que no quiere dejar nunca ser parte de esto que tan feliz la hace. Todo el cansacio, toda la angustia de abrir los ojos, toda la paz, todas las charlas, las cagadas, las risas, los llantos... todo vale la pena. TODO hace que una vez más diga: hasta el próximo enero gasj. Porque creo sentirlo más que nunca si me comprometo a decir que cada primera quincena de enero de mi vida....ya tiene un destino. Y son ustedes.


Grupo Andino
Santa Julia 63

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