Esos días en los que una sola pregunta puede arruinar tu más perfecta sonrisa: ¿por qué? No hay respuesta, simplemente consta de un empujón tremendo que te grita "¡caminá!". Y no pensés más, vos camina...
... pero a veces encontrar una certeza estaría bueno.
Algunos le llaman fe, yo creo que ya la perdí.
Agus Terrizzano
No hay comentarios:
Publicar un comentario